La higiene y una limpieza exquisita son imprescindibles para hacer un correcto uso de nuestra sala de baño. Para lograr plenamente este objetivo, te proponemos una serie de consejos que seguro te resultarán útiles.
Lo primero a tener en cuenta es la periodicidad con que hacemos estas labores. Acostumbrarnos a una limpieza semanal es lo más recomendable, ya que la acumulación de suciedad y cabellos no es nada agradable. También debemos recordar hacer una vez al mes una limpieza especial más a fondo. En ese caso, atenderemos la correcta higiene de conductos de ventilación, desagües y áreas de difícil acceso. Con ello evitaremos acumular más suciedad y, sobre todo, evitaremos malos olores y atascos.
No olvides emplear el producto adecuado dependiendo de lo que quieras limpiar. Ciertos productos químicos pueden deteriorar muebles y grifería, por lo que siempre hay que leer las instrucciones y asegurarse de que usamos el material apropiado.
Muebles y sanitarios
El diseño de muebles y sanitarios con los que equipamos la sala de baño puede ser un aliado para las tareas de limpieza. En general, las líneas sencillas, sin demasiadas curvas, evitan que se acumule suciedad.
Por otro lado, si optamos por la instalación suspendida en muebles, lavabos, inodoros y bidés será mucho más fácil acceder a los rincones. Siguiendo con la cuestión de los sanitarios, te aconsejamos inodoros de diseño rimless con paredes interiores uniformes que distribuyen mejor el agua en las descargas. Añadir una tapa de fácil extracción también simplificará la limpieza.
Juntas de azulejos
Cuidado: las juntas de los azulejos tienden a acumular hongos y moho, afectando a la apariencia de la sala de baño si nos olvidamos de ello. Puedes utilizar un cepillo de cerdas duras, o uno de dientes viejo para esta tarea. O bien, usar productos específicos. Para este último caso, te recomendamos especialmente aplicar borada chroma, que podrás encontrar en nuestras tiendas.
Espejos sin marcas
El espejo tiene un peso visual enorme en la sala de baño, ya que es de los primeros elementos donde fijamos la atención. No dejes que un espejo con cercos estropee la apariencia del aseo. Para ello, usa un limpiacristales adecuado que no deje marcas.
Grifería y accesorios
Dispensadores de jabón, grifos… Son elementos en los que a veces no reparamos, pero también se manchan, ya sea de agua o productos de higiene personal. Si quieres restaurar su brillo original, aplica el limpiador adecuado con un paño suave.
Limpieza y reposición de escobilleros
La escobilla del inodoro es una posible fuente de gérmenes y bacterias. Por eso, además de su limpieza después de cada uso, te recordamos que tendrás que reemplazarla por una nueva cada cierto tiempo.
Estamos a tu disposición para asesorarte en el equipamiento de tu sala de baño y asegurar que tiene todo lo necesario para facilitar su limpieza. ¡Visítanos o entra en nuestra tienda online!